Se dispara el precio del aceite de oliva.

En un contexto de inflación y de subida generalizada de precios, destaca por encima del resto el precio del aceite de oliva, producto estrella de la gastronomía española, del que somos los principales exportadores a nivel mundial, y cuyo precio se ha duplicado en el último año hasta alcanzar en la actualidad los 8,72 euros/litro.

La principal causa de la escasa producción es la sequía, que ha provocado una pésima cosecha, hasta un 56% menos que en la campaña de 2021/2022, y por tanto una menor cantidad de existencias. A ello se unen las malas expectativas para la próxima campaña, por la falta de lluvias, y al incremento de costes de producción debido a la subida de la energía, combustible y el resto de insumos.

 

En cuanto a los precios en otros países de nuestro entorno, si en España es de 8,72 euros/litro, en Italia asciende a 8,21 euros/litro, en Francia a 7,95 euros/litro y en Portugal a 6,86 euros/litro. La experta Teresa Pérez justificaba el menor precio de otros países mediante el concepto de rotación, es decir, que en España se consume más aceite y el producto rota más, por lo que el aumento de precio en nuestros supermercados se nota antes.

En cualquier caso, la subida del precio del aceite, que ha llegado hasta los 10 euros el litro en algunos supermercados, ha provocado el descenso de su consumo interior, que ha caído un 41% hasta julio, así como de las exportaciones a otros países, que ha caído un 32%.

Solo la llegada de lluvias en este otoño frenará la escalada del precio del aceite, y aunque según el AEMET el inicio del otoño será más cálido de lo habitual, sí que hay mayor probabilidad de tener un otoño lluvioso (40-50%) que de tener un otoño seco (20-30%). De ser así, se frenaría la escalada de precios, aunque estos solo bajarían si se completara una buena campaña en 2024-2025 que permitiera superar la falta de existencias.